Estudios científicos

Effect of Dietary Phenolic Compounds on Incidence of Cardiovascular Disease in the SUN Project; 10 Years of Follow-Up

Abstract:

The health benefits of plant-based diets have been reported. Plant-based diets found in Spain and other Mediterranean countries differ from typical diets in other countries. In the Mediterranean diet, a high intake of phenolic compounds through olives, olive oil, and red wine may play an important role in cardiovascular prevention. Prospective studies carried out in Mediterranean countries may provide interesting insights. A relatively young Mediterranean cohort of 16,147 Spanish participants free of cardiovascular disease (CVD) was followed (61% women, mean (SD) age 37(12) years at baseline) for a median of 12.2 years. Dietary intake was repeatedly assessed using a 136-item validated food frequency questionnaire, and (poly)phenol intake was obtained using the Phenol-Explorer database. Participants were classified as incident cases of CVD if a medical diagnosis of myocardial infarction, stroke, or cardiovascular death was medically confirmed. Time-dependent Cox regression models were used to assess the relationship between (poly)phenol intake and the incidence of major CVD. A suboptimal intake of phenolic compounds was independently associated with a higher risk of CVD, multivariable-adjusted hazard ratio for the lowest versus top 4 quintiles: 1.85 (95% CI: 1.09–3.16). A moderate-to-high dietary intake of phenolic compounds, especially flavonoids, is likely to reduce CVD incidence in the context of a Mediterranean dietary pattern.

Comentarios divulgativos:

La Dieta Mediterránea es un patrón alimentario rico en compuestos fenólicos, unas sustancias presentes en los alimentos de origen vegetal, que podrían ser responsables en parte del efecto cardioprotector de esta alimentación, y que se encuentran en cantidades significativas en alimentos característicos de la dieta mediterránea como las aceitunas, el aceite de oliva o el vino tinto.

Este estudio observacional encontró que en el marco de una dieta mediterránea ingerir cantidades moderadas o altas de compuestos fenólicos, especialmente del grupo de los flavonoides, parecía tener un efecto protector frente al desarrollo de enfermedades cardiovasculares.

La investigación incluyó datos de 16.147 españoles sin enfermedad cardiovascular, a los que se siguió durante una media de 12 años. Se recogió información sobre sus hábitos alimentarios, se calculó su nivel de consumo de compuestos fenólicos y se contabilizaron los nuevos casos de enfermedad cardiovascular (infarto de miocardio, ictus, muerte cardiovascular).

Los participantes con un consumo bajo de compuestos fenólicos tenían un riesgo un 85% (HR: IC 95%:1,09-3,16) mayor de enfermedad cardiovascular en comparación con los participantes que consumían las cantidades más elevadas.

En base a estos resultados, promocionar un patrón alimentario mediterráneo con alimentos tradicionales ricos en compuestos fenólicos, como las frutas, las verduras, el aceite de oliva o el vino, podría contribuir a la prevención del desarrollo de enfermedades cardiovasculares.

En el futuro, son necesarios estudios de intervención en humanos que confirmen estas observaciones y tengan en cuenta factores como el impacto del cocinado en la disponibilidad de estos compuestos o su interacción con la microbiota intestinal.