
Un nuevo estudio revela los efectos antinflamatorios del consumo moderado de vino
28 de abril de 2025
La investigación liderada por las Dras. María Pérez y Rosa Casas, de la Facultad de Farmacia y Ciencias de la Alimentación y del IDIBAPS, de la Universidad de Barcelona, demuestra que los biomarcadores del consumo de vino tinto se asocian con un menor riesgo cardiovascular.
Publicado en la revista científica internacional The Journal of Nutrition, Health and Aging, este estudio obtuvo la ayuda a la investigación de FIVIN, con el apoyo de OIVE.
La investigación que relaciona biomarcadores del consumo vino tinto con una menor inflamación vascular, como factor clave en la prevención de enfermedades cardiovasculares ha sido publicada en la revista científica The Journal of Nutrition, Health and Aging.
Un estudio liderado por las doctoras, Maria Pérez y Rosa Casas, de la Facultad de Farmacia y Ciencias de la Alimentación y del IDIBAPS, de la Universidad de Barcelona, que obtuvieron en el año 2022 la ayuda de investigación “Vino, Nutrición y Salud” de la Fundación para la Investigación del Vino y la Nutrición (FIVIN), con el apoyo de la Organización Interprofesional del Vino de España (OIVE).
Esta investigación forma parte del reconocido ensayo clínico PREDIMED, centrado en los beneficios cardiovasculares de la Dieta Mediterránea. El estudio tenía dos objetivos principales: evaluar la fiabilidad de los metabolitos del resveratrol derivados del microbiota —un polifenol presente principalmente en el vino tinto — como biomarcadores objetivos del consumo de esta bebida, y por otro, analizar su asociación con marcadores de inflamación sistémica y riesgo cardiovascular para la salud.
El estudio observó una asociación inversa entre los niveles urinarios de estos metabolitos y la glicoproteína VCAM-1, vinculada con los procesos de inflamación vascular y ateroesclerosis. Es decir, a mayor presencia de estos metabolitos, menores los niveles de VCAM-1, lo que sugiere un posible efecto protector del consumo moderado de vino sobre la salud cardiovascular.
“El uso de biomarcadores como los metabolitos del resveratrol en orina, permite una medición objetiva del consumo de vino tinto, con mayor precisión que los cuestionarios de frecuencia de consumo de alimentos tradicionales”, explica la Dra. Maria Pérez Bosch. “Estos resultados respaldan el papel de una dieta saludable, como la mediterránea, que incluye un consumo moderado de vino durante las comidas principales del día, en la reducción del riesgo cardiovascular”.
El consumo moderado de vino, integrado en la Dieta Mediterránea, muestra efectos protectores para la salud cardiovascular
La investigación concluye que el patrón de consumo moderado de vino —equivalente, a una copa al día—, siempre en el contexto de las comidas y dentro de una Dieta Mediterránea equilibrada, podría desempeñar un papel relevante en la prevención de enfermedades cardiovasculares. Lejos de promover un consumo indiscriminado, los investigadores insisten en la importancia de la moderación y del marco dietético saludable acompañado de actividad física diaria. El estudio no solo refuerza la idea de que no todos los patrones de consumo de alcohol tienen el mismo impacto sobre la salud, sino que también aporta evidencia científica sobre cómo el vino, cuando se consume con moderación y acompañado de una alimentación rica en frutas, verduras, aceite de oliva virgen y frutos secos, puede integrarse de un estilo de vida cardioprotector. Se pone así en relieve la importancia de considerar no solo qué se consume, sino también cómo, cuándo y con qué se acompaña.
Dicha investigación fue presentada en el Congreso Internacional Lifestyle, Diet, Wine and Health celebrado en Roma.
El comité científico de FIVIN advierte que, aunque numerosos estudios han demostrado los posibles beneficios del consumo moderado de vino para la salud, no es motivo suficiente para que alguien que no bebe comience a hacerlo por motivos de salud. Cualquier estudio sobre el vino y la salud no reemplaza el consejo médico de un profesional.
VER DECLARACIONES DRA. MARÍA PÉREZ
