Estudios científicos
Alcohol intake and risk of coronary heart disease in younger, middle-aged, and older adults
Abstract:
BACKGROUND: Light to moderate alcohol consumption is associated with a reduced risk of coronary heart disease. This protective effect of alcohol, however, may be confined to middle-aged or older individuals. Coronary heart disease incidence is low in men <40 years of age and in women <50 years of age; for this reason, study cohorts rarely have the power to investigate the effects of alcohol on coronary heart disease risk in younger adults. This study examined whether the beneficial effect of alcohol on coronary heart disease depends on age. METHODS AND RESULTS: In this pooled analysis of 8 prospective studies from North America and Europe including 192,067 women and 74,919 men free of cardiovascular diseases, diabetes, and cancers at baseline, average daily alcohol intake was assessed at baseline with a food frequency or diet history questionnaire. An inverse association between alcohol and risk of coronary heart disease was observed in all age groups; hazard ratios among moderately drinking men (5.0 to 29.9 g/d) 39 to 50, 50 to 59, and >or=60 years of age were 0.58 (95% confidence interval [CI], 0.36 to 0.93), 0.72 (95% CI, 0.60 to 0.86), and 0.85 (95% CI, 0.75 to 0.97) compared with abstainers. However, the analyses indicated a smaller incidence rate difference between abstainers and moderate consumers in younger adults (incidence rate difference, 45 per 100,000; 90% CI, 8 to 84) than in middle-aged (incidence rate difference, 64 per 100,000; 90% CI, 24 to 102) and older (incidence rate difference, 89 per 100,000; 90% CI, 44 to 140) adults. Similar results were observed in women. CONCLUSIONS: Alcohol is also associated with a decreased risk of coronary heart disease in younger adults; however, the absolute risk was small compared with middle-aged and older adults.
Comentarios divulgativos:
La incidencia de la enfermedad coronaria (CHD) es baja en hombres más jóvenes de 40 años y en mujeres más jóvenes de 50 años. Por esta razón el efecto de la ingesta de bebidas alcohólicas sobre el riesgo de padecer enfermedad coronaria en adultos más jóvenes raras veces ha sido investigado. En principio, la causa de CHD entre adultos más jóvenes puede diferenciarse en esto entre los individuos más viejos. Por ejemplo, entre adultos más jóvenes, relativamente más casos de CHD pueden ser atribuible a causas genéticas. De ahí que el alcohol no necesariamente puede proteger contra CHD en esta categoría de edad.
Para investigar si el efecto beneficioso de alcohol sobre las enfermedades coronarias depende de la edad, un análisis reunido de 8 estudios previos de Norteamérica y Europa fue realizado. 192,067 mujeres y 74,919 hombres sin padecer enfermedades cardiovasculares, diabetes y cánceres fueron incluidos. La edad de los participantes varió a partir de 35 a 89 años en mujeres y a partir de 35 a 80 años en hombres.
Con una edad media de 50.4 y 54.0 años, respectivamente. La proporción de no bebedores varió considerablemente entre estudios del 11.4 % al 53.0 % en mujeres y del 4.7 % al 45.8 % en hombres. Haciendo un promedio de la ingesta diaria de bebidas alcohólicas fue evaluado en relación con la frecuencia de ingesta de alimentos o con un cuestionario de historia de la dieta. El grado de alcohol medio de consumo varió de 4.4 a 20.8 g/d en hombres y de 1.7 a 8.9 g/d en mujeres. Se observó una asociación inversa entre la ingesta de bebidas alcohólicas y el riesgo de enfermedad coronaria para todas las categorías de edad. La reducción del riesgo entre hombres que beben moderadamente (5.0 a 29.9 g/d) comparado con hombres abstemios era el 42 % en la categoría de edad 39 a 50, 28 % en la categoría de edad 50 a 59, y el 15 % en la categoría de edad de más de 60 años.
Sin embargo, los análisis indicaron una pequeño ratio de diferencia en la incidencia entre abstemios y consumidores moderados en adultos más jóvenes de mediana edad y adultos más viejo. Resultados similares fueron observados en mujeres. Puede ser concluyente de este estudio que el consumo de bebidas alcohólicas esta también asociado con un riesgo disminuido de padecer enfermedad coronaria en adultos más jóvenes. Sin embargo, la reducción de riesgo absoluta es pequeña comparando con la mediana edad y los adultos más viejos. Lo importante de este estudio es que la ingesta moderada de bebidas alcohólicas son asociadas con un riesgo inferior para CHD independientemente de la edad.