Estudios científicos

Effect of short-term moderate intake of ice wine on hepatic glycolipid metabolism in C57BL/6J mice.

Abstract:

As the correlation between high fructose intake and metabolism-related diseases (e.g., obesity, fatty liver, and type 2 diabetes) has been increasingly reported, the health benefits of consuming ice wine high in fructose have been called into question. In this study, 6-week-old male C57BL/6J mice were divided into control (pure water), fructose (130 g L-1 fructose solution), alcohol (11% alcohol solution), low-dose (50% diluted ice wine) and high-dose ice wine (100% ice wine) groups to investigate the effects and mechanisms of short-term (4 weeks) ice wine intake on hepatic glycolipid metabolism in mice. The results showed that short-term consumption of ice wine suppressed the elevation of low-density lipoprotein cholesterol content and did not cause hepatic lipid accumulation compared with those of the fructose group. Meanwhile, ice wine had no significant effect on lipogenesis although it inhibited fatty acid oxidation via the PPARα/CPT-1α pathway. Compared with the control group, ice wine interfered with the elevation of fasting glucose and the insulin resistance index in a dose-dependent manner, and led to an increase in plasma uric acid levels, which may further contribute to the disruption of glucolipid metabolism. Overall, short-term moderate intake of ice wine over a 4-week period may not significantly affect hepatic glycolipid metabolism in C57BL/6J mice for the time being.

Comentarios divulgativos:

El vino de hielo es un vino hecho de uva helada con una fuerte concentración en azúcar. Cuando la uva se hiela, el agua se expande y rompe la piel de la uva de manera que se pierde agua y el azúcar queda más concentrado (≥125 g/L). De modo que esta investigación evalúa el efecto a corto plazo de la ingesta moderada de vino de hielo, rico en fructosa, en el metabolismo hepático de ratones macho.

Para ello, los ratones se dividieron en cinco grupos de experimentación. Al grupo control se le dio diariamente agua, a otro grupo sólo se le dio fructosa, a otro sólo se le administró alcohol y a los dos restantes se les dio una dosis baja o alta de vino de hielo. Tras cuatro semanas de tratamiento se observó que no se afectaban significativamente los marcadores del metabolismo de los animales. No se observaba un aumento relevante de los niveles de lípidos en sangre, ni en el hígado, y se inhibía la oxidación de ácidos grasos. Sin embargo, sí se observó que el hígado de los ratones que habían recibido el vino de hielo pesaba más, pero no se identificaron cambios en su composición.

Además, estos ratones también tenían mayores niveles sanguíneos de ácido úrico, y los índices de glucosa y resistencia a la insulina en ayunas más elevados, y el incremento era mayor cuanto mayor era la dosis. Por otro lado, se observó que, en comparación con los animales que habían recibido fructosa diariamente, los animales que tomaron el vino de hielo no incrementaban tanto sus niveles de colesterol total, colesterol LDL, triglicéridos hepáticos.